

El domingo asumió la presidencia de la Argentina el ultraderechista Javier Milei. Dio un discurso en las escalinatas del Congreso. Muchos fueron a escucharlo con la argentinidad erecta bien manifestada en cientos de banderas patrias. Habló de inflación pavorosa si no se hacen las cosas que él va a hacer, de ajuste extremo como única salida.
Dijo: “¡No hay plata!”, y la gente coreó: “¡No-hay-plata!”. Dijo: “Vamos a tener menos empleo, más pobres, más indigentes. Al principio será duro”, y la gente coreó: “¡Javier, querido, el pueblo está contigo!”. Entonces habló de seguridad: “Argentina se convirtió en un baño de sangre”.
El país tiene cinco homicidios cada 100.000 habitantes, de los más bajos de la región, pero, apenas terminó esa frase, la gente aulló: “¡Po-li-cía, po-li-cía!”.
Sospecho que esa plaza jamás tuvo a una muchedumbre clamando por la policía, aunque sí a mucha policía cazando ciudadanos.
Pero ahí estaba Milei, prometiéndole a la gente que la estrangularía por su propio bien, y ahí estaba la gente, gozando de ese festín sádico con cantitos de cancha, sin pensar que muchos de esos futuros pobres podrían ser ellos mismos, o que todos esos futuros pobres podrían hacer alguna cosa tan desesperante y desesperada como apropiarse de bienes ajenos entre los cuales podrían contarse los suyos, señores y señoras tan argentinamente reunidos.
Un círculo oscuro: una multitud acepta los azotes de su dominador y, a su vez, pide azotes contra su prójimo, un poco para ser cómplice y otro poco para vengarse de los azotes del que domina.
Más tarde, al saludar desde la Casa Rosada, Milei dijo: “Hoy los argentinos de bien hemos decretado el fin de la noche populista y el renacer de una Argentina próspera y liberal”. No aclaró quiénes son los “argentinos de mal” pero no hace falta tener ninguna imaginación para entenderlo.
(Leila Guerrero, El País)


El hilo se corta por lo más delgado y los despidos de los cuatro jinetes del apocalipsis: Cecco,Azcué,Hein y Frigerio.
Cecco ¿ está “seco” ? Azcué, recalcula y mientras tanto despide municipales, Hein, despide el 30 % de los asesores de los diputados. Frigerio no escucha ni responde a los estatales que baten palmas en la Casa Gris y las calles de Paraná.

Lea este sesudo análisis publicado en PAGINA POLITICA no tiene desperdicio y desnuda lo que todo estamos viendo de un gobierno provincial que está en...Alemania.

El editorialista abandonó la corrección de la pluma de estilo, ingresó a la descalificación por "boludos", un término no habitual en sus textos, como si la violencia verbal que viene de arriba pudiera replicarse desde abajo, aunque dijo que esto no era cierto pues no es una respuesta a los exabruptos de los mandamás, sino una opinión que no encontró otro calificativo para las acciones desplegadas por quienes nos mandan. Habrá que leer y si alguno se anima, opinar sobre un editorial picante.

Los concejales no sesionan porque “no hay temas que tratar”. Ni oficialistas ni opositores encienden una chispa que, al menos, derrita el hielo invernal con una tormenta de ideas y proyecte algo de calor y rumbo.

El candidato a diputado nacional del Partido Justicialista, Guillermo Michel, plantea que la provincia atraviesa una situación de “desgobierno” y que el gobernador Rogelio Frigerio tiene la legitimidad de la elección, pero que le falta construir la legitimidad desde la gestión. “No alcanza con ganar la elección, necesita demostrar que puede gobernar y gestionar la provincia”, manifiesta.





Emanuel Bornicent se enteró de buenas a primeras que se quedaba sin trabajo. Y sin vivienda. Y con la necesidad de encontrar escuela para su hijo a mitad del ciclo lectivo. Se enteró un día inhábil en la Administración: el 27 de junio, Día del Empleado del Estado. Ese día lo anoticiaron que tres días después sería un desempleado.