El descontento con la OEA y las críticas a la decisión del anfitrión de dejar fuera del encuentro a Cuba, Nicaragua y Venezuela, expresadas por el presidente Alberto Fernández en su discurso, marcaron una cita regional que dejó en evidencia la brecha que existe entre EEUU y el resto del continente.
El Presidente señaló que Argentina "está teniendo un crecimiento realmente muy importante y, por lo tanto", no quiere "que ese ritmo se frene o se desacelere".
“América siempre será una prioridad para Estados Unidos”, afirmó el presidente de EEUU al inicio de la primera sesión plenaria de los líderes invitados. El presidente de Argentina y el primer ministro de Belice cuestionaron la exclusión de los regímenes de Cuba, Venezuela y Nicaragua.
El presidente disertó en la IX Cumbre de las Américas y se mostró criticó con la administración del exmandatario estadounidense y también con el gobierno de Mauricio Macri. Además planteó que hubiera "querido otra Cumbre de las Américas", ya que el "silencio" de los países ausentes "nos interpela".
Llevará al encuentro continental la posición de la Celac, con una advertencia sobre las consecuencias de la guerra en Ucrania y la necesidad de una Latinoamérica unida y sin exclusiones.
El secretario de Relaciones Exteriores de México, Marcelo Ebrard, que acudirá en lugar de su presidente, pedirá a Estados Unidos que invierta en Centroamérica para atajar la migración.
El Presidente se sumó a los reclamos ya expresados por sus pares de México y de Bolivia. Esta semana, antes de iniciar la gira, el canciller Santiago Cafiero envió una nota formal a los Estados Unidos para pedir que sea "una cumbre sin exclusiones".
El Presidente, a través de un mensaje grabado, pidió eliminar "políticas agrícolas distorsivas y proteccionistas que han perjudicado tradicionalmente a los productores agrícolas" de los países en desarrollo.
"Ratificaremos nuestra determinación de promover y defender la democracia y los derechos humanos en la región cuando el presidente Biden celebre la IX Cumbre de las Américas", señaló el secretario de Estado, Antony Blinken en un comunicado.