Un barrio de Paraná se vio conmocionado en la tarde de este sábado al conocer que una de sus antiguas vecinas fue asesinada brutalmente. La víctima fue identificada como Mercedes Delia Rodríguez, de 78 años, quien fue hallada con signos de haber sido asesinada con ensañamiento. La señora estaba atada y amordazada en el piso del comedor. En su cuerpo y rostro presentaba cortes producidos por un arma blanca.

Una vecina, cuya identidad se preserva, contó que la mujer no salía mucho de su casa y que tenía problemas con su hija mayor y la pareja de esta. "Anoche hubo una pelea y la hija y el yerno se fueron. La hija le pegó a la señora. Hoy volvieron y le hicieron esto. Yo fui una de las primeras en entrar y la vi a la pobre mujer. Tenía un corte en la cara y vi que estaba atada en los pies con cordones", relató, visiblemente conmovida por el asesinato de su vecina. Además, agregó que un hombre estaba en un auto negro, afuera del hogar, y que se retiró minutos después del asesinato. "Ahí están todavía marcadas las huellas del auto", dijo, señalando unas marcas de neumáticos en el barro.

Un grupo de vecinos y niños se reunieron en los alrededores de la vivienda para observar el trabajo de los investigadores. Hasta allí llegó el fiscal Mariano Budasoff, quien recabó el testimonio de algunas personas y dio las instrucciones de rigor para hallar a tres personas que fueron identificadas por algunos testigos.

"Los vecinos salimos afuera porque escuchamos que corrían por los techos y pensamos que andaban robando. Ahí vimos a una mujer que iba ensangrentada. Luego vinimos para acá y nos encontramos con esto", agregó otra vecina que pidió preservar su identidad ante el temor de que los responsables vuelvan al barrio.

En tanto, desde la Dirección de Homicidios de la Policía de Entre Ríos se detalló que el crimen ocurrió en la Manzana G, en la casa 43 de la planta baja. El relato policial señala que cerca de la siesta de este sábado, dos mujeres ingresaron a la casa de Rodríguez. Una sería hija del yerno y la otra una amiga.

Alrededor de las 14.30, una vecina se percató que dos mujeres saltaron el tapial y cayeron en su patio. La testigo llamó al 911 y, antes de que las mujeres siguieran saltando tapiales, registró una breve secuencia con su teléfono celular. El video es clave para los investigadores.

Más tarde, los vecinos salieron y se encontraron en las inmediaciones. Inmediatamente fueron hasta la casa de Rodríguez pero no consiguieron que les abra. Ante el silencio, los desesperados residentes rompieron la puerta, ingresaron al domicilio y encontraron a la mujer en el piso del comedor, boca abajo, con las manos atadas y amordazada. Hubo vanos intentos por reanimarla.

Horas más tarde, los equipos forenses de la Policía determinaron que la señora falleció por "bronco aspiración con sangre que salía de su boca". Alrededor de las 19 el cuerpo fue trasladado a la morgue, donde se realizarán las pericias forenses correspondientes.

En horas de la noche se supo que la policía había logrado detener a una de las sospechosas. Se trata de la hija del yerno de la víctima, una joven de 29 años quien está señalada como una de las autoras del crimen. Fue encontrada en calle Salvador del Carril, en la casa de una amiga.

Otro homicidio

El viernes por la noche hubo otro homicidio que no trascendió periodísticamente. Ocurrió en jurisdicción de la Comisaría N° 15 , entre las calles 893 y 868, alrededor de las 21. Según se informó, en su domicilio fue encontrado Óscar Darío Escales, de 69 años, con signos de haber sido atacado con una pala.

El jubilado fue encontrado sin vida por su hija de 34 años. La mujer también contó que un hombre la contactó por Facebook porque encontró un bolso en la cancha de fútbol en Balbín y Parera, en donde estaban los documentos de Escales. Por ello, se presume que el hombre fue asesinado en ocasión de robo.