En un intento desesperado para que la justicia la escuche madre de un adicto se cortó las venas

Silvia Tigua es madre desesperada buscando ayuda para su hijo sumido en las adicciones. Ella se cansó de golpear puertas en los tribunales de nuestra ciudad, pero no obtuvo respuestas, eso fue motivo para que esa madre desesperada atentara contra su propia vida, se propinó enormes cortes en la muñeca izquierda, pero afortunadamente fue trasladada a tiempo en una unidad sanitaria al hospital Felipe Heras donde le salvaron la vida.

La madre del joven adicto ya había  generado un revuelo en la vereda de la "Caldera del Diablo" pero no salió nadie a atenderla. Su caso se reproduce en centenares y luego de tal exposición pública, el "último recurso" fue intentar quitarse la vida.  

El lamentable hecho se produjo el viernes  de las 8 Hs. cuando Silvia tomó una cuchilla y quiso poner fin a su vida efectuándose profundos cortes en la mano izquierda, a la altura de la muñeca izquierda. “Estoy cansada de pelear por mi hijo Pablo Masetto -expresó ante cronistas de El Sol-Tele5- pido a la justicia su internación involuntaria, pero no me quieren escuchar los jueces”, dijo resignada Silvia, al tiempo que agregó “quiero poner fin a mi vida, no doy ms, no aguanto más con esta situación, no quiero vivir más porque me cansé de luchar, de golpear puertas para conseguir ayuda para mi hijo, pero fue en vano, en la justicia ni siquiera me quieren atender y yo voy a poner fin a mi vida y será culpa de los jueces que no me ayudan, me cansé”, dijo de manera insistente.

“Quiero decir a través de este medio y que sepan en la justicia que lo intenté una vez, lo voy a volver a intentar y no voy a fallar, no quiero vivir más así -dijo la desesperada madre- me voy matar porque estoy cansada de esta situación, ya no doy más, no puedo más. Agarré una cuchilla y me corté las venas, perdí mucha sangre, vino la policía y una ambulancia y me trasladaron al hospital Felipe Heras y me aplicaron más de cinco puntos, pero más tarde, casi a media noche me llevaron de nuevo porque perdí mucha sangre”, relató y acotó que “cuando me desperté de madrugada estaba bañada en sangre, perdí mucha sangre, pero esto no da para más, la próxima vez no voy a fallar”, advirtió Silvia, en alusión a que se va a quitar la vida.  

“NO ME ESCUCHAN”

Silvia es la madre de Pablo Masetto, un joven que, según su madre "está perdido en las adicciones y pide ayuda", había aseverado en una nota ante este medio. Desde hace siete años, está desesperada madre viene luchando con el problema de su hijo y aseguró que "no me escuchan ni los jueces, ni los fiscales, y ni en Salud Mental. Hay miles de chicos en Concordia en las mismas condiciones de mi hijo".