Entrerriano de 26 años fue asesinado a balazos y su cuerpo apareció en un basural de Rosario

Policiales 29/07/2023 Editor Editor
Rosario, Villaguay 1

Un joven oriundo de Villaguay fue asesinado de varios disparos el lunes por la noche en barrio Las Flores, en la zona sur de Rosario. El cadáver fue hallado el martes a la mañana, en medio de un basural, cercano a una línea precarias viviendas, ubicada a la altura de las calles Lirio y España.

Los vecinos dieron aviso al 911 y recién fue identificado este jueves, a través de las huellas dactiloscópicas, ya que la víctima estaba en situación de calle y no portaba documentación.

Se trata de Paulo Alejandro Maciel, de 26 años. Las pericias indicaron que recibió seis heridas de arma de fuego distribuidas entre la cabeza, la espalda y las piernas, según confirmó el fiscal Alejandro Ferlazzo, a cargo de la investigación. Su identidad fue difundida por el Ministerio Público de la Acusación, organismo que además informó que su último domicilio fue la localidad santafesina de Villa Gobernador Gálvez.

El crimen del joven entrerriano ocurrió en "Ciudad perdida". Así es como llaman los vecinos a ese sector de asentamientos precarios del barrio Las Flores. Cuentan que creció mucho en los últimos años a partir de familias que se quedaron sin vivienda o personas que llegaron de otras provincias a buscar trabajo y apenas encontraron un lugar ahí, más afuera que adentro de Rosario.

Detrás del cruce de Lirio y España, a las espaldas de viviendas muy precarias que rodean un descampado que a su vez no es más que un basural.

"Los vecinos tienen temor. Hay casas cercanas al lugar del crimen. Ellos manifestaron temor a salir, a llamar, a involucrarse”, concluyó el fiscal.

La trágica muerte de Paulo Alejandro Maciel, que llegó a Rosario en busca de oportunidades laborales que nunca se concretaron, ha generado conmoción. Guillermo Campana, abogado y militante de la ONG Causa, brindó declaraciones sobre la situación del joven y la necesidad de abordar las problemáticas que enfrentan los jóvenes en situación de vulnerabilidad en la ciudad.

Campana explicó, en diálogo con el programa Trascendental de LT8, que el joven Maciel llegó a Rosario con la esperanza de encontrar un trabajo, pero al no cumplirse esa promesa, se encontró en una situación de vulnerabilidad y desamparo en la ciudad. La ONG Causa, junto con otros grupos que trabajan con jóvenes en situación de calle en la zona de la terminal, intentaron ayudar a Maciel y a otros jóvenes a reconstruir un proyecto de vida. Sin embargo, debido a la falta de contacto, perdieron rastro de su situación y se enteraron con dolor de su triste desenlace.

Entre ONGs y la calleRosario/12, trazó un perfil de Maciel a partir de un informe de la red Puentes, dedicada al abordaje comunitario de consumos problemáticos, que lo cobijó durante un tiempo que no fue precisado.

El 8 de noviembre de 2018, la ONG le informó al Juzgado de Familia y Penal de Niños y Adolescentes Nº 2 de Concordia sobre la situación del muchacho, que había sido privado de la libertad por la justicia provincial en dos oportunidades. Cuando tenía 21 años comenzó a transitar el centro de día rosarino: en el lugar realizaba talleres recreativos y de oficios, además de ser asistido por un equipo interdisciplinario para la atención individual, compuesto por una médica generalista, una psiquiatra, tres psicólogas, una trabajadora social y un abogado.

En los registros de ese momento figura que “el ingreso de Paulo se produjo de manera voluntaria, es decir, sin derivación de ninguna institución, siendo que él mismo refirió como lugar de procedencia Villaguay”.

En tanto, dijo haber arribado a Rosario “a principios de 2018, con un hombre que le ofreció trabajo de albañil”. Luego de finalizar la changa de constructor -donde aparentemente no le pagaron lo que correspondía-, quedó en situación de calle y su lugar de residencia pasó a ser la terminal de ómnibus.

Tras un tiempo en el refugio, las operadoras de Puentes gestionaron otro tipo de alojamiento, por lo cual comenzó a dormir en el centro de noche del programa Andrés, una asociación civil sin fines de lucro dedicada a la salud y los derechos humanos, comenzando a trabajar en forma conjunta ambas entidades.

Según el mismo escrito, “con respecto a su salud integral, luego de su ingreso comenzamos a realizarle varias entrevistas: no tenía controles recientes de rutina, por lo tanto, se gestiona la realización de laboratorios en el hospital Centenario para evaluar su estado de salud, dando un resultado óptimo. Además, se encuentra realizando tratamiento específico de psicoterapia semanal en relación a su policonsumo problemático de sustancias. Se encuentra lúcido, globalmente orientado, con conciencia de enfermedad y juicio de criterio de la realidad conservado, muestra predisposición para el abordaje evolucionando favorablemente en esta temática”.

En ese momento, el personal que lo atendió remarcó también que “en lo que respecta a su contexto familiar, actualmente no mantiene vínculo ni contacto con ningún miembro, aunque refiere tener necesidad de hacerlo”. 

Te puede interesar
Lo más visto