Denuncian que mala praxis en el Masvernat provocó la muerte de una mujer

Cronistas de diario EL SOL-Tele5 estuvieron presentes en el hospital Masvernat donde familiares de la mujer fallecida se manifestaron. Viviana Escobar, una de las hijas de la mujer fallecida, expresó ante nuestro medio: “Nos mintieron en todo momento”.
Respecto a cómo transcurrieron los hechos, Viviana explicó que su madre - María Angélica Pereyra, de 76 años - quedó internada en terapia a pesar de que “la operación había sido un éxito”, según le explicó el médico que la operó. No obstante, la mujer tuvo una recaída producto de “un virus intrahospitalario que afectó a los pulmones”, según afirmó Viviana que le contaron los médicos.
María Angélica empeoró con el pasar de los días e, incluso, debió ser intubada pues ya no podía respirar por sus propios medios. Finalmente, el día 5 de febrero a las 23 horas, la mujer falleció. Cabe recordar que María Angélica ingresó para ser operada el día 25 de enero a las 21 horas y salió transcurridas las dos horas.
Sus hijas fueron a despedir el cuerpo de su madre al hospital. En un momento, “instintivamente atiné a sacarle la gasa a la herida de mi mamá y no podía creer lo que estaba viendo”, contó Viviana aun sorprendida. La herida “tenía pus verde”, agregó. Por tal motivo, comenzaron a sacarle fotos para documentar lo que estaba ocurriendo y, según relató Viviana, “una enfermera no nos dejaba sacar fotos y le manoteaba el teléfono a mi hermana para sacárselo”.
“(El personal de Salud) jamás nos habló de la herida ni de que hicieron mal las cosas y la dejaron pasar”, dijo ofuscada. “Hay un audio de una de las enfermeras donde dice que el cirujano nunca se acercó a ver a mi mamá. Si ese cirujano se hubiera acercado a ver la herida, se habría dado cuenta que estaba mal”, agregó haciendo referencia a que la muerte de su mamá se pudo haber evitado.
Por otra parte, Gabriela Escobar, hermana de Viviana e hija de la mujer fallecida, manifestó que desde el hospital Masvernat le negaron el pase desde el nosocomio hasta Puiggari (en el municipio de Libertador San Martín, Paraná), lugar donde vive actualmente Gabriela. “A mi mamá le hicieron mala praxis, la operación fue un matambre cocido”, expresó indignada. “Pido justicia, que le saquen la credencial a estos doctores”, concluyó.