CONCORDIA SE UNIÓ A LA CELEBRACIÓN MUNDIAL POR LA CANONIZACIÓN DE CARLO ACUTIS Y PIER GIORGIO FRASSATI

Este domingo 7 de septiembre, el Papa León XIV presidió en la Plaza de San Pedro una histórica ceremonia en la que fueron canonizados Carlo Acutis y Pier Giorgio Frassati, dos jóvenes italianos que se convierten en referentes de santidad para las nuevas generaciones. Acutis, conocido como el “influencer de Dios”, se transforma en el primer santo milenial, mientras que Frassati, alpinista y comprometido con los más necesitados, representa la santidad vivida en lo cotidiano.

En sintonía con este acontecimiento, la ciudad de Concordia rindió homenaje con una peregrinación juvenil que culminó en la Catedral San Antonio de Padua.

UNA PEREGRINACIÓN QUE CONMOVIÓ A LA COMUNIDAD

Guillermo Latrilla, coordinador del área Catedral, relató a El Sol-Tele5 que “jóvenes de distintas parroquias se reunieron en la Estación Norte a las 15:30 para iniciar una peregrinación en honor a los nuevos santos canonizados por el Papa León XIV. Fue una jornada de fe y alegría, marcada por la presencia de las reliquias de Carlo Acutis, que recorrieron la ciudad acompañadas por cantos, oraciones y expresiones de devoción”.

La procesión concluyó frente a la Catedral, donde se celebró una adoración cantada seguida de la Santa Misa. “Fue un momento profundamente emotivo, donde se vivió la espiritualidad juvenil con intensidad y esperanza”, destacó Latrilla.

CARLO ACUTIS: UN SANTO PARA LA ERA DIGITAL

Respecto al impacto de la canonización, Latrilla señaló que “aunque Francisco había anunciado este paso, la ceremonia se postergó tras su fallecimiento. Finalmente, León XIV concretó la canonización, y en Concordia se vivió con especial entusiasmo por la figura de Carlo Acutis”.

El joven Acutis, fallecido en 2006 a los 15 años, utilizó internet para difundir la fe y creó una exposición virtual sobre milagros eucarísticos. Su frase “La Eucaristía es mi autopista al cielo” se convirtió en emblema para miles de jóvenes que hoy lo reconocen como modelo de vida cristiana.

“Los chicos lo sienten cercano, lo ven como alguien que vivió su fe en el lenguaje de esta época. Manejó las redes, hablaba su idioma, y eso genera identificación. Hoy lo llevan como bandera”, expresó Latrilla.

DOS MODELOS DE SANTIDAD PARA EL SIGLO XXI

Pier Giorgio Frassati, por su parte, fue canonizado por su vida de servicio, oración y compromiso social. Murió en 1925 a los 24 años, y su testimonio sigue inspirando a jóvenes en todo el mundo.

“Ambos santos son italianos, pero su mensaje es universal. La madre de Carlo dijo que hoy tendría 30 años, y eso nos interpela: la santidad no es cosa del pasado, es una vocación posible aquí y ahora”, concluyó Latrilla.