Liberaron a la familia Ocampo por la mañana y volvieron a detenerlos por la tarde.

Parece que los procesos judiciales no se unifican para realizar lo que se llama "economía procesal" en esta jurisdicción.

La familia de los Ocampo, que este jueves fue dejada en libertad, volvió a ser puesta tras las rejas, por una nueva decisión del juez Bestián, que acogió con rapidez el pedido del fiscal de Genéro, Dr.Paoli, de que se los ponga a recaudo, mientras instrumenta una IPP por  supuesta extorsión para no difudir un video íntimo de una fémina cuya identidad permanece en secreto, aunque circula en los pasillos de la municipalidad, que sería otra empleada o funcionaria municipal que habría sido filmada por uno de los integrantes de la familia manteniendo sexo "salvaje" (según los mentideros políticos) con una personalidad política local, lo que no pudo ser confirmado.

La mujer de Ocampo en foto tomada en la Jefatura Departamental de Policía, en la tarde de ayer, tras ser nuevamente detenida.

Lo cierto es que, tanto Ocampo, funcionario municipal, como su esposa, empleada municipal, están tras las rejas, tras -seguramente- haber encontrado elementos incriminatorios en el allanamiento dispuesto por la justicia. De otra forma, no se visualiza que una simple denuncia pueda disparar allanamiento, detención y vuelta a detener a las mismas personas, un procedimiento que resulta atípico y que tiene indudablemente aristas políticas, tanto por la reconocida militancia en el PRO del detenido, como por el supuesto "partener" de la denunciante en las escenas sexuales que habrían sido registradas por medio de un smartphone.