
La Corte Suprema cierra el caso Ilarraz por prescripción: el cura había sido condenado por abuso de menores
Los magistrados determinaron que los delitos en cuestión excedían a los 12 años de cometidos.
Acusado de asociación ilícita y cohecho, ahora sumó una nueva imputación. Por el momento no es apresado por sus fueros.
Judiciales23/06/2022Walter Bento, el juez federal de Mendoza, que tiene a su cargo los procesos electorales en esa provincia, se convirtió en foco del debate en los tribunales: ocupa su puesto en el juzgado, teniendo un procesamiento confirmado como jefe de una asociación ilícita que cometió delitos de cohecho activo, lavado de activos y enriquecimiento ilícito, entre otros. Pesa sobre él una orden de detención que no se cumple a raíz de sus fueros. Pero ahora se le ha sumado un nuevo pedido de detención luego de que la justicia mendocina lo imputara por más delitos por tráfico de influencias a favor de un empresario amigos que tenia deudas con la AFIP.
La denuncia en su contra en el Consejo de la Magistratura, con pedido de desafuero incluido, no avanza. Los pasillos de ese organismo señalan que el kirchnerismo lo protege. Con la llegada del presidente de la Corte Suprema Horacio Rosatti a ese organismo, los consejeros por unanimidad sólo firmaron su expulsión de un concurso. Es que Bento pretendía competir para convertirse en integrante de la Cámara Federal de Casación Penal.
“No tengo nada que ver con todo esto que me atribuyen: con nadie ni con nada. Tengo que demostrar que soy inocente”, dijo Bento desde su cargo, en entrevistas que brindó a medios de Mendoza, mientras hablaba de pruebas inventadas en su contra.
El caso
Walter Bento asumió al frente del juzgado federal 1 de Mendoza con competencia electoral en septiembre de 2006, tras un concurso. El juzgado estaba vacante desde 2002 cuando el entonces juez federal Luis Leiva fue destituido, luego de que el fallecido banquero Raúl Moneta denunciara que ese magistrado le había pedido una coima.
Católico, hincha de Boca y coleccionista de búhos, Bento fue nombrado durante el gobierno de Néstor Kirchner, con el aval del histórico operador del peronismo mendocino Juan Carlos “Chueco” Mazzón. En 2011 hizo un resonante allanamiento con la Gendarmería en Cablevisión, en pleno conflicto del kirchnerismo con el Grupo Clarín. En aquel momento, la Corte Suprema anuló su intervención y Bento enfrentó una denuncia en el Consejo de la Magistratura que terminó desestimado por el aval del kirchnerismo.
Ahora, su actuación volvió a quedar en la mira. En marzo del 2020, el fiscal General Dante Vega investigaba una causa por narcotráfico y se encontró con información que salpicaba al juez . De la pesquisa sobre los teléfonos surgieron numerosos mensajes de texto y de voz en los que se aludía al “juez”, al “número 1″ o al “gran jefe”, en supuesta referencia al magistrado ahora procesado. A eso se le sumaron las declaraciones de Diego Barrera, el principal imputado por el secuestro y homicidio del empresario y despachante de Aduana Diego Aliaga, vecino del juez y quien habría actuado en nombre del magistrado.
Según el fallo dictado en Mendoza, Bento lideraba una organización ilícita en la que habría operado con la asistencia de los abogados Luciano Edgardo Ortego y Jaime Andrés Alba junto con el fallecido Diego Aliaga para llevar adelante un mecanismo delictivo mediante el cual se ofrecían beneficios procesales por el pago de dádivas.
A estos últimos, se le suman también los abogados Martín Ríos y Alejandro Aramayo, encargados de asistir a Ortego y Alba; Walter Eduardo Bardinella Donoso, que se presentaba como el contacto con el mundo criminal y proveedor de posibles “clientes”, y el comisario José Gabriel Moschetti, quien ofrecería un canal de información y cobertura en el ámbito policial.
Entre los procesados por haber abonado para obtener beneficios hay acusados de contrabando y de narcotráfico, delitos de competencia en la justicia federal y en cuyas causas tuvo intervención Bento. De acuerdo a esa acusación, bajo el liderazgo de Bento, esas personas habrían desplegado maniobras para lograr beneficiar ilícitamente a determinados imputados, previo pago de coimas.
Los bienes del juez fueron inhibidos y tiene un embargo por 327 millones de pesos que también recae en su esposa Marta Boiza, también de carrera judicial. Precisamente, la fiscalía sostiene que desde el 2010 la situación patrimonial del juez se incrementó notablemente: compra de inmuebles, automotores, participaciones en fideicomisos inmobiliarios y realización de más de 200 viajes a distintas ciudades de Estados Unidos en una década. En las últimas horas se conocieron distintas fotos de sus viajes por Las Vegas en limusina.
Este martes, el juez federal de San Rafael Eduardo Puigdéngolas, que interviene en esta causa, imputó a Bento por nuevos delitos: incumplimiento de los deberes de funcionario público, cohecho, prevaricato y abuso de autoridad, como en una causa a favor de un narcotraficante y otra, por el tráfico de influencias a favor de un empresario amigo de su familia que tenía una deuda impositiva con la AFIP y Rentas.
Los magistrados determinaron que los delitos en cuestión excedían a los 12 años de cometidos.
El viernes 20 de junio se cumplio un año del trágico choque frontal en la Ruta Provincial 39, a la altura del kilómetro 223, que dejó un saldo devastador: cuatro jóvenes trabajadores muertos en el acto. El responsable del otro vehículo implicado en el siniestro fue Juan Ruiz Orrico, funcionario del gobierno provincial de Rogelio Frigerio y dirigente histórico del PRO. A pesar de haberse comprobado que manejaba con alcohol en sangre, Orrico continúa en libertad, sin restricciones, ni fecha de juicio confirmada. Las familias, en cambio, apenas si logran sostenerse entre el dolor, el reclamo incansable y la indiferencia judicial.
En la audiencia para obtener la aprobación constitucional del Senado de Entre Ríos, el actual fiscal interino, Martín Nuñez, dijo que cada fiscal tiene en tratamiento un promedio de 1.000 causas y que esto trae stress a los encargados de manejarlas, exponiendo ante los senadores que "se necesitan más fiscales en Concordia."
Germán Davico pudo ser intendente de Gualeguaychú en 2023 por un fallo del Tribunal Electoral de la provincia que quedó jaqueado porque la Procuración General se expidió por admitir la acción de inconstitucionalidad que se presentó contra la candidatura del referente de Nueva Generación, que fue electo intendente. El duro pronunciamiento sostuvo que hubo “una interpretación sesgada, equivocada de la manda constitucional que le ha hecho decir a la norma principal aquello que no dice”.
Se trata de la fiscal interina, Josefina Beherán, aspirante a titularizar en Gualeguay. Se alegó la ausencia de acceso constitucional válido al cargo; su actuación deficiente y selectiva en causas de corrupción policial y narcotráfico; y la violación del principio de objetividad y legalidad en su ejercicio actual del cargo. Se indicó que archivó una causa por robos en la que luego se probó que los autores eran los policías encargados de investigarlos, algo que la fiscal no advirtió ni denunció.
No hay estabilización a los 12 metros, la realidad superó a los pronósticos y ahora se pronostica para mañana martes 1 de julio, la cota en el Puerto de Concordia a 12,40, mientras sube la cota de la represa a 35,50 para contener la masa hídrica que baja del norte.
La Selección Argentina de Talla Baja regresará a Concordia para su última etapa de preparación rumbo a la Copa América 2025, en Paraguay.
La agencia de Lotería de Calabacilla, zona ubicada entre Puerto Yeruá y el Peaje de la Ruta 14, en el Municipio de Estancia Grande, Departamento Concordia, vendió una de las boletas ganadoras del sorteo del Quini 6 de este domingo 29 de junio. El apostador o apostadora afortunado o afortunada ganó casi 800 millones de pesos.
La decisión forma parte de la causa que impulsa el fondo buitre Burford Capital, que compró los derechos de litigio y ganó un juicio por u$16.099 millones. La historia del caso, qué alcance tiene el fallo y el verdadero botín en juego (Vaca Muerta).
Mientras el agua avanza con la fuerza implacable del río, lo único que retrocede es la presencia del Estado. Vecinos del barrio María Goretti, en Concordia, sobreviven en una situación límite: no solo tienen parte del barrio anegado por la creciente, sino que también fueron privados del suministro eléctrico por una medida preventiva dispuesta por la Cooperativa Eléctrica que, en lugar de ser acompañada por asistencia, los dejó completamente desamparados.