Fueron detenidos este domingo un asesor de la Cámara de Senadores Nacional y otro de Diputados de Misiones con 92 pastillas de éxtasis con el logo de Sprite. Al momento del operativo, según indicaron fuentes oficiales a Infobae, intentaron coimear a los agentes federales.

El procedimiento lo llevó a cabo la Sección XV Rosario de Gendarmería, que detuvo un Chevrolet Meriva que era manejado por Hernán Diego G. y que tenía a Ariel V. como acompañante. Ahora, la investigación quedó a cargo del fiscal federal Javier Arzubi Calvo, titular de la Fiscalía N°1 de Rosario, y del juez Carlos Vera Barros, a cargo del Juzgado Federal N°3 de la ciudad.

Cuando fue entrevistado por los gendarmes, Hernán Diego G. expresó ser personal administrativo del Congreso Nacional y luego presentó la identificación como asesor de Presidencia del Senado de la Nación. Como le faltaba documentación para poder circular, los agentes hicieron bajar de la camioneta a los dos ocupantes y procedieron a hacer una requisa del vehículo, donde encontraron una bolsa con 92 pastillas de éxtasis bicolores con la inscripción de Sprite.

Según indicaron fuentes judiciales a Infobae, al momento del hallazgo de la droga, los dos ocupantes del auto explicaron que se dirigían desde Buenos Aires a Rosario para asistir a una fiesta electrónica y ofrecieron el dinero que llevaban –los 30.000 pesos y 3.000 dólares– a cambio de que no los dejen detenidos, según se indicó oficialmente.

Como dato curioso, los agentes federales constataron que el asesor del Senado, Diego G., tiene antecedentes penales por una causa que data de 2004 ante un juzgado de Lomas de Zamora, por la que recibió en 2012 una suspensión de juicio a prueba, donde debió cumplir reglas de conducta por el plazo de 3 años por asociación ilícita en concurso real con estafa. Además, el Tribunal Oral Federal N°1 de la Ciudad de Buenos Aires lo condenó en octubre de 2019 a una pena de 4 años y 2 meses de cárcel en un expediente por infracción a la ley 23.737 de drogas.

Por su parte, el acompañante Ariel V. tenía un pedido de captura desde abril del año pasado, que fue emitido por el Juzgado N°1 de Resistencia, Chaco, en una causa por narcotráfico. También tenía antecedentes. Un Tribunal Oral Federal de Posadas lo condenó en 2016 a la pena de 3 años de prisión de ejecución condicional por el delito de contrabando de importación de estupefacientes.