Desde hace semanas, en las farmacias de Italia faltan medicamentos de uso cotidiano a base de ibuprofeno o indometacina, así como antiinflamatorios, antipiréticos, analgésicos e incluso antibióticos y el ministro de Sanidad, Orazio Schillaci, ha abierto una mesa de trabajo permanente para controlar y frenar el desabastecimiento.

Según la Agencia Italiana del Fármaco (AIFA) hay cerca de 3.000 medicamentos con problemas en la producción y distribución, pero de estos 1.500 son reemplazables por fármacos genéricos.

"Las empresas están haciendo todo lo posible para asegurar la continuidad de la producción, tratando de encontrar principios activos y materias primas en otros mercados, además de los de uso general”, expresó Marcello Cattani, presidente de Farmindustria, la principal asociación de sociedades farmacéuticas.

La AIFA explica que los motivos de la falta de medicamentos van desde el "cese de comercialización" definitivo o temporal , pasando por "problemas de producción" no especificados, hasta la "alta demanda" y la consiguiente "distribución limitada".