Se trata de una obra que prevé detener los daños que se han ocasionado por el fenómeno y a su vez garantizar una solución a largo plazo ante la dinámica que experimenta el río Uruguay frente a Salto.

Elevada inversión

El trabajo para detener la erosión va a ser mixto: una parte, con infraestructura que los técnicos van a definir y, por el otro, mediante la plantación de flora nativa que es lo que genera contención a todo el tema del deslizamiento de tierra.

Se comienza a pocos metros de la represa de Salto Grande -hacia el sur hasta la zona de Las Cavas- con una inversión de más de un millón y de dólares. Las gestiones se demoraron por el tema de la pandemia, ya que hubo que traer técnicos del BID que en su momento no podían viajar, de pero desde CTM se afirma que la obra se estará concretando en el verano después de 40 años que se comenzó a hablar del tema y solamente se colocó en su momento una malla de contención en la zona de playas.

El objetivo es recuperar todo ese tramo en una primera etapa y luego ir hacia el sur del puerto, para llegar hasta la zona de Arenitas Blancas donde este fenómeno viene haciendo estragos, fundamentalmente en la estabilidad de los puentes.