Ambas se encuentran enfrentadas por el negocio y el control de la zona, tienen cada una un ejército de soldaditos que no tienen empachos en dispararse entre ellos y a quienes quieran ingresar al barrio que está bajo el dominio de ambas bandas.

Esta situación ha sido reiteradamente puesta en conocimiento de las autoridades policiales y judiciales, por lo cual, en la madrugada del sábado se decidieron a poner las cosas en orden, o mejor dicho en el frízer.

De tal manera que sendos órdenes de allanamiento fueron expedidas y el barrio se llenó de patrulleros y policías, buscando a las féminas y sus adláteres, a la sazón, los soldaditos. 

No se obtuvieron datos sobre el resultado de los allanamientos y si se detuvo o no alguna persona, pero la idea de las autoridades es tratar de poner “en caja” el barrio y si para eso es necesario mandar de “vacaciones” a las amazonas, no dudarán en hacerlo pues lo están pidiendo a gritos los demás habitantes de esa parte de la ciudad que se siente indefensa ante el crecimiento de las bandas criminales, como estas dos, lideradas por dos mujeres jóvenes y con mucha pólvora.