Una madre concordiense aseguró que tiene un hijo perdido en la droga y nadie la escucha

Silvia Tigua es madre de Pablo Maseto, un joven que, según su madre, está perdido en las adicciones y pide ayuda. Desde hace siete años, esta desesperada madre viene luchando con el problema de su hijo y asegura que "no me escuchan ni los jueces, ni los fiscales, y ni en Salud Mental. Hay miles de chicos en Concordia en las mismas condiciones de mi hijo".

Concordia20/04/2024EditorEditor
silvia tigua 3
Madre e hijo: el drama de las adicciones

En diálogo con cronistas de Diario El Sol-Tele5, Silvia Tigua, madre de Pablo, expresó que su hijo "se encuentra internado en Salud Mental del hospital y yo he recorrido los Tribunales y Salud Mental".

"En Salud Mental me atiende la Dra. Petit y me atiende el director del hospital, con los cuales estoy muy agradecida porque me atendieron y el médico me escuchó", agregó.

"Creo que como mamá de Pablo quien padece esquizofrenia en adicciones, yo pido a los jueces, a fiscales y a Salud Mental, que tendrían que cambiar las leyes. Mariana Pinedo, la abogada de Salud Mental me conoce, como también en Fiscalía por todas las veces que fui a pedir ayuda para internar a mi hijo con adicciones".

"A lo que voy yo es que para la gente humilde no hay justicia, no hay salud, porque te mandan de un lado para otro como lo están haciendo conmigo", lamentó Silvia.

"A esta lucha yo la llevo desde hace siete años. Mucha gente también critica sin saber y juzga, pero esa misma gente le compra cosas a mi hijo que son mías y de nenes, o cosas que no son de él, pero después para hablar están presentes", denunció públicamente Silvia.

"Tuve un caso particular el día que se lo trasladó a Pablo. La Policía de Benito Legerén, otra vez Nicolás Rodríguez y su gente, el otro es Guillermo, que es policía del barrio, vino a decirle a mis hijos más chiquitos, a Jesús y a Lautaro, que Pablo se había escapado de Salud Mental y que ya estaba en el barrio robando", relató Silvia.

Por ese motivo, "yo fui hasta Salud Mental y Pablo estaba durmiendo, pero los policías entraron a la casa de los vecinos buscándolo porque supuestamente lo habían visto en el barrio. Llamaron diciendo que Pablo andaba haciendo desastres, siendo que tengo los papeles de que Pablo está internado en Salud Mental y seguirá internado en Salud Mental", subrayó.

"Ni los jueces, ni los fiscales ni en Salud Mental me escuchan porque hace muchos años que vengo con esta lucha porque hay una internación involuntaria y no me la quieren dar porque hay muchos casos de injusticia, pero lamentablemente todo se tapa con plata. Yo ya no sé más qué hacer, pido ayuda para la internación de Pablo porque no es fácil salir de las drogas", dijo Silvia.

"Conozco miles de pibes con este problema porque no es solamente el caso de mi hijo Pablo, muchos pibes están perdidos en la droga y no es fácil salir. A Pablo lo he tenido 4 días encerrado y medicado, sale y cae en lo mismo", lamentó y suplicó: "Necesitamos la internación involuntaria para salvar a muchos chicos que están en la misma situación que mi hijo Pablo".

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