El Reino Unido ha registrado en las últimas 24 horas un total de 53.945 nuevos casos de covid-19, lo que supone la cifra más alta en este país desde el pasado 17 de julio, cuando se superaron los 54.000 contagios diarios.

En su último balance difundido este jueves, el Gobierno británico señaló que otras 141 personas murieron por la enfermedad en ese mismo periodo, para elevar el total de fallecidos desde el comienzo de la pandemia hasta los 145.281 en los 28 días posteriores a haber dado positivo en un test de la covid.

Desde el pico vivido el 17 de julio, las cifras diarias de contagios en el Reino Unido se han mantenido de forma constante entre los 30.000 y los 50.000, aunque los epidemiólogos temen que puedan ir en aumento según avance el invierno.

Este incremento de casos se produce además cuando la nueva variante ómicron, que se teme que pueda ser más transmisible, ya ha comenzado a expandirse por el país.

Restricciones por ómicron

Tras diez nuevos casos identificados hoy, se han detectado hasta el momento un total de 42 en el conjunto del Reino Unido.

La presencia de la ómicron ha llevado al Ejecutivo a reintroducir algunas restricciones -después de haberlas prácticamente eliminado en verano- como la obligatoriedad de llevar mascarillas en tiendas y transporte colectivo o la imposición de una prueba PCR para cualquier viajero que entre en el país.

También se ha acelerado la campaña de vacunación de refuerzo para todos los adultos que ya hayan recibido la pauta completa, con el objetivo de haber ofrecido esa dosis a todos los adultos para final de enero.

Según los datos oficiales, un 80,7 % de los británicos de más de 12 años han recibido dos dosis de la vacuna, mientras que a uno de cada tres (33,1 %) ya se le ha administrado el refuerzo.