Si nos guiáramos por el trámite del partido, el empate hubiera sido lo que más se hubiera acomodado al mismo. Pero se gana con goles y Santa María pudo romper esa paridad, en ese rubro, para llevarse el gran festejo en la ya noche del domingo.

Lo que quedó como buen saldo para todos fue el colorido enorme que le pusieron las dos hinchadas, que colmaron las tribunas de espaldas al Anfiteatro Walter Perafán, y la que da al Parque Mitre. Pero eso no fue todo, ya que muchísima gente también colmó las tribunas de cemento y las plateas, haciendo un marco que anduvo en las 3.500 personas aproximadamente. Un espectáculo, el de la gente, que sí superó las expectativas de todos.

El partido comenzó demasiado “eléctrico” por parte de los dos equipos, e incluso también con pierna fuerte, y de a poco se fueron acomodando, bajando un poco los decibeles. Claro que ninguno de los dos regaló nada, y entonces los espacios se achicaron y eso hizo que el buen fútbol estuviera ausente. Por ende, brindaron un partido un tanto pálido, con pocas situaciones y el gran partido quedó en intenciones.
Un tremendo derechazo del “Beto” Luna, a los 34, fue el que definiría el partido. El jugador tomó la pelota cerca del área y no dudó en pegarle, y lo hizo con calidad y precisión. El balón hizo una rara parábola en área y cayó pesadamente detrás del vuelo estéril de Franco Cabral, para lo que sería el definitivo gol del choque.

En el segundo tiempo Cole intentó buscar, pero el Santo se cerró bien atrás, casi no dejó espacio y esa búsqueda terminó de manera infructuosa. Pero tampoco Santa María dispuso de contraataques certeros, salvo algún par de corridas que parecieron que iban a terminar mejor. Los arqueros tuvieron poco trabajo y el mismo fue descolgar centros que caían en las respectivas áreas, alguno con un poco “veneno”, pero nada más.

El tiempo pasó, y Santa María terminó sonriendo en el clásico, gracias a un nueve que está derecho, porque ayer Roberto Luna no hizo buen partido. Pero hizo el gol del triunfo, y la gente del Santo no necesitó nada más para irse feliz.

EMPATE A PRIMERA HORA

A primera hora en cancha de Libertad, Comunicaciones y Victoria igualaron 1 a 1. El partido fue “tarjeteado”, dado que Comunicaciones terminó el partido con ocho jugadores y su rival con diez. El partido no fue bien jugado, y de hecho fueron pocas las situaciones de gol que se crearon, más allá de los goles que se convirtieron en el partido.

El marcador se abrió a los 14 minutos, tras un centro pasado que cayó en el segundo palo (derecho del arquero) y entrando bien por detrás de todos cabeceó Leonardo Sanabria para vencer al guardameta, que intentó llegar a la pelota y no pudo.

Igual con el gol el partido no cambió mucho, y se siguió jugando en forma muy regular y con mucha lucha.

El primer tiempo sólo dejó jugar para dos expulsiones y las dos seguidas. A los 44 vio la roja Walter Miranda, el marcador central de Victoria, mientras que a los 45 el que se fue expulsado fue Claudio Díaz, de Comunicaciones.

En la segunda mitad, a pesar de que Victoria intentó llegar al empate, Comunicaciones estaba bien plantado y pudo enhebrar algunas contras, que perdieron efecto en tres cuartos de cancha.

A los 20 minutos, hay un tiro libre cerca del área, Lucas Troncoso es quien patea, tiene complicidad en un roce en la barrera y la pelota entra junto al palo derecho para convertirse en el empate de los del Tiro Federal.

Como un calco del primer tiempo, la segunda mitad también dejó solamente dos expulsados más, y los dos de Comunicaciones, ya que a los 34 se fue Enzo Salas, y a los 45 el autor del gol Leonardo Sanabria, por protestar.

Un empate que seguramente el tiempo sabrá decir a quien realmente le sirvió.

TRES PUNTEROS

La jornada dejó como saldo que San Lorenzo y Santa María siguen como líderes de la Zona A, ya que los dos ganaron ayer, mientras que Libertad sigue imparable y con puntaje ideal, dado que cosechó otros tres puntos seguir mandando solo en la Zona B.